Dentro de la Casa de El Caballero del Escarabajo

Nada más entrar por la puerta de color azul de la fachada de la casa, y sólo después de habernos descalzado, una vivienda es un hogar, y un hogar es templo, nos encontramos, en primer término, en el recibidor, este futbolín, puesto que Dragó ha sido siempre un gran jugador de futbolín, por lo que una partida con los invitados a la casa de El Caballero del Escarabajo es cita ineludible. Cuenta el propio Dragó, entre risas, que durante una visita de la familia Marichalar a Castilfrío de la Sierra el pequeño Froilán, nada menos que el tercero, en aquella época, en la línea de sucesión real, mientras jugaba con sus primos al futbolín se hizo daño en el ojo con una de las barras de los mangos. Imagínese el lector los titulares del día siguiente: "Froilán, tercero en la línea de sucesión de la Corona de España, tuerto en casa de Dragó".

 

El recibidor está compuesto de varias puertas, a nuestra izquierda una puerta que descubre unas escaleras que suben hasta la primera planta; a la derecha observamos otra puerta que da a la "tabernilla" (que puede verse en la fotografía), una especie de minibar donde Dragó puede servir unas bebidas a los invitados mientras pierden al futbolín contra él; y frente a la puerta de entrada principal otra puerta que nos lleva al salón, donde podemos apreciar el lugar donde los habitantes de la casa se relajan escuchando música, tocando el piano, leyendo o viendo una buena película, al calor de la lumbre de la chimenea.

 

 

 

Dejamos el salón y nos dirigimos hacia la primera planta subiendo las escaleras que se encuentran a la derecha de la puerta principal, en el recibidor, encontrándonos con una habitación con varias puertas que dan a diferentes dormitorios y cuartos de baño. La puerta que se ve en la fotografía con el farolillo japonés da a un pasillo que conduce a otras tantas habitaciones para invitados.

 

Los dormitorios no están carentes del simbolismo marca de la casa.

 

 

Finalmente nos dirigimos hacia el segundo piso por las mismas escaleras que conectan las tres plantas. Allí nos encontramos en un ático o desván que, paradójicamente, es la parte de la casa de El Caballero del Escarabajo donde más tiempo pasan sus habitantes, pues aquí se encuentran los despachos de trabajo y el dormitorio conyugal. Podemos perdernos en esta segunda planta entre adornos de todos los países, recuerdos de antiguos viajes, fotografías de juventud, alfombras persas, turcas, etc. Tras entrar en la estancia es ésta la imagen que podemos observar: Naoko y Fernando compartiendo su lugar de trabajo. Podemos apreciar la disonancia palpable entre el ordenador de Naoko y la máquina de escribir de Fernando.

 

En la siguiente fotografía podemos ver a Fernando comprobando su agenda personal. Al fondo podemos distinguir, a la izquierda, la puerta de entrada al despacho de Fernando, donde recala cuando necesita mayor concentración y donde medita.

 

En esta mesa se encuentran ordenados libros de consulta, manuscritos y varias carpetas conteniendo los borradores de varias obras inéditas de Fernando Sánchez Dragó.

 

 

En esta fotografía podemos advertir la entrada, que no puerta, al dormitorio conyugal tras las cortinillas de corte japonés al fondo.

 

 

 

 

Fernando, con esta fotografía, les dedica a los lectores de sanchezdrago.com su mejor sonrisa y les agradece su amistad, interés, apoyo y fidelidad. Sanchezdrago.com es una web muy visitada, lo cual es motivo de gran orgullo. También, divertido, muestra cómo mira él internet, agazapado tras Naoko, y sólo con su ayuda.

 

Entramos en su despacho particular, una habitación con un inmenso ventanal que ocupa toda una pared hasta el techo, una pieza muy iluminada, con ventanucos también en el techo. Aquí podemos ver a Fernando mientras consulta en su mesa de trabajo un volumen de la enciclopedia Larousse.

 

Frente a su mesa se encuentra el famoso ataúd de madera, comprado al Ayuntamiento de Castilfrío. “Se cedía a las familias más humildes para los velatorios, pero yo le doy otro uso: me meto dentro para meditar. La muerte me atrae, no me asusta. Opino que la vida sigue después de la muerte y lo único que me preocupa es indagar en ese misterio. Y es a lo que me dedico principalmente: a través del sexo (una especie de muerte en vida), de las sustancias enteogénicas (que proporcionan experiencias de muerte y resurrección) y del estudio”, asegura Fernando.

 

El despacho está repleto de documentos derivados de sus investigaciones sobre la muerte de su padre, Fernando Sánchez Monreal, joven periodista asesinado en Burgos por sedicentes miembros de la Falange el 14 de septiembre del 36. Dragó se ha dedicado en los últimos años a recabar información sobre los últimos días de su padre, cuyos resultados han tomado forma en el que para él es "el libro más intenso de mi vida": Muertes paralelas. Así, se pueden ver numerosas cartas manuscritas, envueltas en plástico, pertenecientes a la correspondencia que su padre mantenía con su madre una vez que había estallado la Guerra Civil.

Asimismo, aquí podemos verle junto al Tarot que Alejandro Jodorowsky le regaló, señalando, por supuesto, el Arcano XIII.

 

Entonces nos dirigimos hacia la parte opuesta de la habitación principal de este ático: el dormitorio. Atravesamos las cortinillas que lo separan de la pieza y penetramos en el santuario tántrico de Castilfrío. Nada más entrar saltan a la vista dos grandes cuadros con posturas tántricas colgados en la pared de la cabecera del tálamo. La cama está casi a ras de suelo, por algo es de tatami japonés. Alrededor de ésta cualquier adorno es de procedencia oriental, aunque prevaleciendo en las paredes gran cantidad de retratos y fotografías. Digna de admiración es la hilera de libros de cabecera de Fernando.

 

 

 

Dentro del dormitorio está el cuarto de baño de la pareja, donde, para nuestro asombro, y como si fuéramos Parsival ante el Santo Grial, nos encontramos con 'El Elixir de la Eterna Juventud'.

 

 

Francisco Javier Redondo Jordán

 

 

· Escuela Iniciática

· Exteriores de la casa de El Caballero del Escarabajo

· La futura Escuela Iniciática o Centro de Estudios Místicos