Las criadas

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Fue Nuria Espert quien estrenó ese drama de Genet cuando aún no había llegado la censura de la corrección política. Teníamos la de Franco, pero ésa dejaba en paz el román paladino. Millás y Juan Diego denuncian la gangrena del idioma originada por la ideologización lingüística en un monólogo, recién estrenado, que se titula “La lengua madre”. ¿Cómo se llamaría ahora la pieza de Genet si alguien la repusiera? ¿“Las empleadas de hogar”? Estoy seguro de que Boadella y Natalio Grueso no consentirían tan grotesca estupidez en Madrid, pero ignoro lo que pasaría en la Cataluña soviética del rey Arturo, en la Vasconia presidida por un lendakari que dice “los vascos y las vascas” o en la Andalucía de Billy el Gordillo. Una vez, hace de eso mucho tiempo, un becario de guardia sustituyó “criada” por “empleada de hogar” en el texto que yo acababa de enviar a este periódico. No sé lo que estipula su Libro de Estilo, pero monté en cólera y me acogí al fuero de la soberanía gramatical del escritor. Los jefes me prometieron que no volvería a suceder y así ha sido. El miércoles apareció aquí una noticia concerniente a la estadística sobre el servicio doméstico elaborada por la Organización Mundial del Trabajo. En ella se hablaba de “empleados de hogar”. Urkullu habría añadido “y empleadas”. Flaco favor se hace con ese supuesto eufemismo a quienes en teoría se benefician de él. Criada viene de creare, verbo latino que dio en español “criar” y “crear”. Son sinónimos. Consulten el diccionario. Acepciones: producir algo de la nada (lo cual se considera propio sólo –con tilde, señores académicos– de Dios), nutrir la madre a sus hijos con la leche de sus pechos, cuidar, instruir, educar… ¿Qué desdoro hay en todo eso? Decía Machado: “Bueno es recordar / las palabras viejas / que han de volver a sonar”. Mi infancia son recuerdos de patios de criadas. Hermosa palabra. Los hogares no son una oficina. En ellos no se emplea a nadie. Quienes allí trabajan son o deberían ser miembros de la familia unidos a ella por los lazos del afecto mutuo y la recíproca confianza. Ahora es obligatorio burocratizar a esas personas. ¡Qué pejiguera! Muchas acabarán en el paro, otras en la ilegalidad y todas serán más pobres. Apiádese de ellas, señora Báñez. No las atosigue. Déjelas que vayan a su aire. Es lo que desean. Las buenas intenciones son el parqué de Satán. Fue también Machado quien dijo: “Por dar al viento trabajo / cosía con hilo doble / las hojas secas del árbol”.

Publicado en la sección “El lobo feroz”, El Mundo, 14 enero 2013


Publicado en: ...el 17 Enero 2013 @ 09:32 Comentarios (5)

5 comentarios

  1. A 17 Enero 2013 @ 12:49 pivodi dijo:

    El Estado es el mayor corruptor de la sociedad, adultera las palabras, y actúa como esclavizador de mentes. El secreto de la libertad radica en educar a las personas, mientras que el secreto de la tiranía está en mantenerlos ignorantes. Es la libertad lo que está en juego. En boca de los mediocres la palabra “libertad” es como un fuelle que infla los ánimos al precio de ahuecar el cerebro. Si usted no tiene libertad de pensamiento, la libertad de expresión no tiene ningún valor. Sólo el que sabe es libre, y más libre el que más sabe.

    ¿Y que más dará? El único interés en denunciar estas adulteraciones de lenguaje sería ayudar a los demás, ¿a caso es ese el camino? Aquellos que toman lo no-real por real y lo real por no-real y por ende caen víctimas de nociones erróneas, nunca alcanzarán la esencia de la realidad.

  2. A 17 Enero 2013 @ 13:20 Er Manué dijo:

    Dragó, ahora que te han echado de Telemadrid quizá por no ser suficientemente genuflexo hacia tu ama… No. Eso es imposible. Más genuflexo y hay que hacerte transplantes de rótula.
    Ahora que estás fuera de Telemadrid… ¿te vas a buscar la vida en la empresa privada o, como buen liberal, atracarás en el puerto estatal de TVE?
    Apuesto por lo segundo.

  3. A 17 Enero 2013 @ 16:46 lagai dijo:

    Aparte del lumbreras que firma esta nueva soflama con cierto “tufillo medieval”, en la que queda meridianamente claro que no se entera que el lenguaje es algo vivo, que evoluciona, tal y como evoluciona las costumbres. Quizás le gusten otros tiempos de criados,señoritos latigazos… pero que le vamos a hacer vivimos en el presente (incierto quizás) pero presente al fin y al cabo, en el que las formas (únicamente las formas) han cambiado, la esencia sin embargo se mantiene y tu eres el más vivo ejemplo de ello.
    Sin embargo el motivo de que entre no es el estupendo sabio que veranea en oriente ¡ommmmmmmmmmm!…El motivo es contestar a un tal Rocigalgo, una persona de bien (al menos se incluye en el subconjunto sin sonrojarse lo más mínimo).Debería darse cuenta que la autproclamación injustificada y carente de argumentación escasea de valor ante un “montonazo” de gente que no tenemos el gusto de conocerle, si al menos tuviese la cortesía de demostrar porque es gente de bien, podría colar, de lo contario evitemos “vanagloriarnos” sin necesidad. Mira “gente de bien” puedo vivir perfectamente sin muchas cosas, soy hombre de pocos vicios, pero hay cosas a las que difícilmente me resisto,y entre ellas es contestar a cretinos que se creen muy listos, lo siento es una debilidad, algo humano , algo sin duda de lo que carecen “vuesa merced” y el “jaimito” oriental que firma arriba.
    Para acabar si realmente te preocupan los gustos sexuales del personal deja de escribir tonterías y apúntate en una página de contactos, creo ya haber mencionado que soy de gustos simples y esto incluye también al sexo…

  4. A 17 Enero 2013 @ 17:53 Er Manué dijo:

    Dragó el criado, el lacayo, el empleado de hogar, el esclavo, el sirviente, el servil, el servidor, el mayordomo, la mucama, el felpudo, el aposento, el inodoro, el negro con paipai, el Reinfield, el Igor, el vasallo, el chico para todo, el correveidile, el analingüista, el feligrés, el súbdito, el perro, el kleenex… de su ama.

  5. A 18 Enero 2013 @ 15:46 juan dijo:

    ¿Natalio Grueso? ¿el vividor ese con el dinero ajeno? ¿el saqueador de la Fundación Niemeyer? Vaya individuo que pones por ejemplo, no lo entiendo.