Ciudadanía

manifestacion recortes madrid ciudadania 2012

Me exaspera esa expresión, de la que usan y abusan todos los tertulianos, los manifestantes, las pasionarias al modo de la Colau, la Talegón o la Candela, los locutores, las locutrices y, por supuesto, los políticos. Es un flatus vocis similar a aquél en el que incurren quienes hablan del pueblo o quienes dicen, como a menudo lo hace el Rey, todos los españoles. ¿Todos? Según, según… A mí, por ejemplo, me la sopla que nuestra selección gane un partido de fútbol. Ya sé que soy rarito, pero eso no origina pérdida de nacionalidad. ¿Son conscientes las personas citadas de que al atribuir a la ciudadanía los latiguillos que salen de su boca están zanjando una de las más viejas y arduas cuestiones de la filosofía? Fue Zenón de Elea quien planteó la famosa “aporía sorites”: ¿cuántos granos de trigo se necesitan para formar un montón? No es pregunta baladí. Con ella, según Aristóteles, vino al mundo la dialéctica o técnica de argumentación que permite refutar las teorías de los adversarios demostrando que conducen a paradojas: la de Aquiles y la tortuga o la del citado montón de trigo. Y en eso llegan la Talegón, la Colau o cualquier otro demagogo de guardia, se arrogan la representación de la ciudadanía –vale decir: de la totalidad de los ciudadanos, incluyéndome a mí, que estoy en contra de sus propuestas, pero que ciudadano, a mi pesar, soy– y resuelven en un pispás lo que ni Zenón ni Aristóteles consiguieron resolver tras sesudas reflexiones. ¿Que cien antitaurinos se pintarrajean de sangre el cuerpo en la explanada de Las Ventas? ¡Pues hale! La ciudadanía desea que se prohíban los toros. ¿Que mil personas se enfundan una bata blanca y se van a la Puerta del Sol a vociferar mientras cinco millones de madrileños siguen en sus asuntos? ¡Pues hale! La ciudadanía se opone a las medidas de supuesta privatización sanitaria adoptadas por el gobierno de la Comunidad. Y así hasta todas y cada una de las treinta y tantas mil manifestaciones que en el último año han estrangulado la economía del país y han puesto patas arriba la quietud de sus calles. Descanse Zenón en paz. Por fin sabemos cuántos granos de trigo se necesitan para formar un montón. Una golondrina no hace verano, pero dos o tres, según los demagogos, sí. Doctrina Colau, doctrina Talegón: la nouvelle philosophie, que además de peripatética, como la de Aristóteles, es patética. Sus voces y sus coces son las de la ciudadasnía, con ese de tertuliasnos y orejeras de borrico.

Publicado en “El Lobo Feroz”, El Mundo, 25 febrero 2013


Publicado en: ...el 26 Febrero 2013 @ 16:57 Comentarios (8)

8 comentarios

  1. A 26 Febrero 2013 @ 20:05 pivodi dijo:

    El otro día paseaba con un amigo cuando nos acerquemos a un expendedor de dinero de una determinada entidad crediticia. Debía él sacar algo de esto para pagarme una ronda, bueno. Estábamos haciendo cola, pues había bastante gente, ciudadanía según su nomenclatura, señor Dragó, bueno. Esperábamos turno de acceder al artefacto enclaustrado en la pared mientras hablábamos de lo curioso que resultaba, a finales de mes, que hubiese una cola para el mismo. En eso que mi amigo me comenta que solo tenia unos cientos de euros en la cuenta, yo intuía que no quería pagar la ronda pero lo deje continuar con su exposición. Comentaba mi amigo que la señora que estaba delante de nosotros debía de tener miles de euros en su cuenta, y el señor que estaba usando el artefacto en ese momento incluso podría tener decenas de miles de euros. Curioso pero nada extraordinario pensé, no le dije nada, deje que continuara con su exposición. Decía, mi amigo, que si pudiera el sacar dinero con su tarjeta de las cuentas de los otros clientes de la entidad, ciudadanos según su nomenclatura, señor Dragó, si pudiera, seria algo fantástico, decía mi amigo, así podría disponer de más dinero. Sorprendido quede, mire a mi amigo y le pregunte ¿quieres robarles? No, no, me respondió mi conocido, junto en ese momento dejo de ser amigo y paso a ser un simple conocido, pero continuo disertando. No me refiero a robarles, me refiero a redistribuir la riqueza que ellos tienen, decía esta persona que estaba a mi lado, y que alguna vez fue amigo mio. ¿Redistribuir la riqueza se llama ahora a robar? le pregunte. Bueno, es como lo de los impuestos, todos pagamos impuestos, bueno, todos los que trabajan, claro, y los que necesitan dinero se les entrega ayudas sociales o subvenciones, es una distribución de la riqueza. Aquí ya me dejo tocado el colega, pero aun así, hacer caja común del capital bancario y redistribuirlo entre los clientes me parece un poco fuerte, no creo que los que tienen algo de dinero en sus cuentas quieran que se les retire para ingresarlo en las cuentas de los que menos tienen.

    Después sigo, un saludo.

  2. A 26 Febrero 2013 @ 21:06 pivodi dijo:

    Son granitos de arena de una masa todos tan iguales, tan pequeños, tan redonditos, diria Nietzsche. La gran simulación. La nostridad adquiere mil nombres y ninguno verdadero. El socialismo parasitario reencarnado en progre artista de la ceja defendiende la sanidad pública para que el lumpen no inunde sus hospitales privados. La alternativa progre e histérica debido su incapacidad inherente para materializar algo más allá del berrinche solo puede anunciar por medio de la megafonía ambulante:

    Insatisfechos del mundo, uníos.

    …Y el mundo da una vuelta más. Todos somos hijos de Dios, menos los ateos que son huérfanos (aquí debería de haber sustituido “somos” por “son”, pero he preferido dejarlo así). Como decía Sartre: El Yo que yo soy depende, en sí, del Yo que no soy todavía, en la medida precisa en que el Yo que no soy todavía depende del Yo que ya soy. Todo esta por hacer, y es por eso que mi consejo sigue siendo no hacer nada, esperar, y por sí solo el pueblo se organiza, con el tiempo por aliado.

    Un saludo.

  3. A 26 Febrero 2013 @ 21:07 pivodi dijo:

    perdón, donde puse insatisfechos quería poner indignados.

  4. A 27 Febrero 2013 @ 01:29 Indignado dijo:

    Hombre, el método de repartición de tu ex amigo no es muy elaborado, pero eso no quiere decir que el actual sistema no sea injusto.

    pi: no te entendí bien si crees en Dios o no. Yo creo.

    Un saludo.

  5. A 27 Febrero 2013 @ 01:32 Indignado dijo:

    Ya sé que Dragó dice no creer exactamente en Dios, pero eso es afinar demasiado, son conceptos demasiado vagos. Yo sí que creo en Dios, en el alma también. En casi todo lo espiritual, a decir verdad.

    Saludos

  6. A 27 Febrero 2013 @ 01:33 Indignado dijo:

    A Dragó le está dando ultimamente por vulgarizarse mediante palabros. Solo espero -por su salud mental, mayormente- que no sea debido a que nos lee.

    :-)

  7. A 27 Febrero 2013 @ 11:15 Er Manué dijo:

    El vulgo, la plebe, la chusma, la muchedumbre, el populacho, la vorágine, la turbamulta, el vasallaje, el subditaje, y, sobre todo, la hinchada.

  8. A 27 Febrero 2013 @ 11:41 Er Manué dijo:

    María Antonieta Dragó y sus triles.

    Decir “el pueblo” o “los españoles” no es decir TODOS. Es que tiene que haber alguna forma simplificada de referirse al personal. Y para diferenciar la voluntad de cada uno del personal, para eso, están cosas como el sufragio universal, la libertad de expresión, la libertad de manifestación (tú también vas a manifas con los obispos guatones, Dragó)
    Lo de “españoles…” así, convirtiéndoles a todos en la misma unidad de destino en lo universal era una cosa de tu admirado Caudillo. De esos tiempos que tanto añoras.