El pase del desprecio

No creo que quienes perpetran El Gran Debate, programa de griterío al que casi todo el mundo sigue llamando (y por algo será) La Noria, sepan gran cosa de toros, pero lo de “pase del desprecio” –en México lo llaman “del desdén”– es expresión que sola se alaba. Seguro que la entienden.

El torero vuelve la espalda al toro, deja caer la muleta y se larga. El pase suele darse por el pitón derecho, cosa que en el caso de Jordi González es imposible, pero algunos matadores lo dan por el izquierdo. Lo que nunca, en cambio, había sucedido, hasta la noche del sábado, es que dos matadores ejecuten esa suerte al alimón. Mi hija Ayanta y yo lo hicimos, y salió perfecta.

Víctor Hugo publicó ‘Los miserables’ en 1862. Pensé en recurrir a ese título al iniciar estas líneas, pero terminé desechándolo por anacrónico. No creo que ni Jordi ni la chica que lo ayuda hubiesen nacido en tan remota fecha, lo que disipa la sospecha de que el autor francés, al escribir su novela, pensara en ellos.

Llamé yo, eso sí, miserable –mi-se-ra-ble– al locutor del programa poco antes de dejarlo con un palmo de narices y reiteré la definición, ya en los pasillos, cuando me sacudía de las alpargatas la arena de un coso de quinta categoría en el que nunca debí prestarme a torear. A tal expresión, castiza a más no poder, recurren los toreros cuando deciden, por la razón que sea, que jamás de los jamases volverán a pisar el ruedo de una plaza que no los merece.

A la moza que lo ayuda, en cambio, le ahorré el adjetivo, aunque justificado estaba, porque siempre he sentido debilidad por las pibas monas. Si al nuevo Papa, según confesión propia, también le pasó, ¿por qué no va a pasarme a mí, que soy pecador de a pie? Lo de mona va sin segundas.

Verdad es, lo reconozco, y sé que a ese sofisma se agarrarán los citados cuando inicien su pataleo la próxima semana, si no antes, que he sido colaborador a salto de mata del programilla en cuestión. Cierto, cierto… Sólo cabe decir mea culpa y acogerme al propósito de enmienda sin el que no hay absolución ni del Papa ni de nadie. ¿Me servirá de descargo la evidencia de que lo hacía no por gusto, sino por el vil metal? Lo primero habría sido prueba de monstruosidad ética y estética; lo segundo, en días tan achuchados por la crisis como los que corren y con una nueva boca a mi cargo… En fin, en fin… ¿Qué les voy a contar? Por primera vez en mi vida gasto más de lo que gano.

Ayer, pese a ello, rompí con furia mi último contrato en las barbas de un redactor y un par de administrativas. Tengo ahora los trozos aquí delante y lo mismo los enmarco para que den fe de mi arrepentimiento. Me los traje por cautela, no fuera a ser –estaban ya firmados– que, a imitación de Bárcenas, me denunciasen por incumplimiento laboral. ¡Capaces serían!

pacto de sangre portada fernando sanchez drago ayanta barilli

Un buen pellizco –no diré la cifra para que los de la Red no la envidien ni mis ex compañeros de tertulia la reclamen– a tomar por saco… Beberé menos champán. Así es la vida. Pero más vale honra sin Telecinco que Telecinco sin honra, ¿no creen?

¡Total! Iba siempre renegando, mi mujer lo sabe, a un programa que acaba cuando empieza el día –¡yo, que me acuesto a las diez de la noche!– y en el que todo está organizado para que nadie pueda decir nada, excepto gritos, consignas e insultos. Siempre salía con mal sabor de boca. Seré ahora más pobre, pero dormiré más y viviré mejor.

Mi hija, en un artículo paralelo y anterior a éste, ya ha contado cómo fue todo. Poco cabe añadir.

Muchos amigos, en los días previos, nos decían:

–¡No vayáis! ¡No vayáis! Es una trampa. Os están engañando…

Tenían razón, pero caí en ella. Yo, y sólo yo, porque mi hija, más cauta, más sensata, mujer al fin, receló hasta el último momento. Creo que no deberíamos ir, papá, me decía. Hasta cinco veces hablamos a lo largo de la semana con las gentes de la redacción. El mismo sábado, a media tarde, y a impulsos de la creciente inquietud de mi hija, conseguí hablar con la directora de la redacción. Me dio su palabra de que no era una encerrona, de que jugarían limpio, de que no sacarían las cosas de su contexto, de que se limitarían a interrogarnos sobre el libro sin caer en chismes de corrala ni en maledicencia de arpías, de que la conversación sería amable, cordial, educada, afectuosa…

Ya, ya. Nosotros íbamos a hablar de literatura, de dos relatos de amor –amor de padre, amor de madre, amor de hija, amor de esposo–, de un libro de buenos sentimientos escrito por dos buenas personas para que lo lean las personas buenas y quienes quieran llegar a serlo. Ellos, no. Ellos –los miserables, el locutor sin escrúpulos y la chica mona que lo ayuda–, sólo querían volcar sobre ese libro, sobre Ayanta, sobre mí, sobre nuestra familia, sobre el niño que ese mismo día cumplió seis meses, toda la podredumbre moral que llevan dentro.

De modo que mi hija y yo, al ver lo que sucedía y antes de que sucediera, empuñamos, como ya saben, la muleta de la dignidad y dimos al alimón el pase del infinito desprecio que su conducta nos inspiraba. Ellos, cínicos hasta el fin, no sólo no se disculparon, sino que cargaron la suerte hasta llegar a la infamia de decir que lo traíamos preparado para vender más libros.

Fue la chica mona quien escupió el veneno, y luego, según me cuentan, se sumó a la calumnia una de esas tertulianas teloneras que hablan de todo sin saber de nada. ¿Su nombre? Aguante la vela: Isabel Durán, a la que tenía por amiga. Que no me salude a partir de ahora. Tampoco yo lo haré.

¡Para vender más libros! ¡Manda carallo! ¿A quiénes? ¿A los que ven ese tipo de programas? ¿A los asnalfabetos que los aplauden?

Entérense, borriquitos que tiran de los cangilones de La Antigua Noria, de que quienes venden los libros, y no hay en ello desdoro, sino mérito, son los editores, los distribuidores y los libreros. Nosotros, los escritores, los escribimos, sólo eso, y si se venden, bien, y si no, también, y si se leen, aún mejor, porque no lo hacemos por dinero, sino por vocación. Jamás he preguntado a un editor cuántos ejemplares tira de mis libros ni cuántos se han vendido. Es cosa que me deja indiferente. Me entero de las cifras cuando, una vez al año, por febrero, me llega la liquidación de los derechos. Y ni siquiera me fijo mucho en ella. Se la paso a quien me hace la declaración de impuestos, y punto sin pelota, pesebristas que hacéis ésta a quienes os sirven pienso.

Empecé hablando de toros. Taurina iba la noche. Treinta segundos después de abandonar el plató ya estaba entrando en el móvil de mi hija un mensaje que decía:

–¡Olé, olé y olé!

¿Sabes quién lo enviaba, Jordi? Pues uno de tus colaboradores. Tendrás que depurarlos.

Y enseguida llegó otro mensaje a mi teléfono. Decía: –¡Cosas así sólo las hacen los grandes!

Dispón ahora tus cañones de basura, traidorzuelo, y dispara cuanto quieras. La chusma te jaleará mientras con nosotros cierran filas los patricios. Ésa es nuestra victoria y tu derrota.

Hasta nunca. Yo me voy a beber champán para celebrarlas, pero nadie de mi familia, y Ayanta, menos, levantará la copa a tu salud.

Publicado en elmundo.es, 18 marzo 2013


Publicado en: ...el 19 Marzo 2013 @ 12:59 Comentarios (22)

22 comentarios

  1. A 19 Marzo 2013 @ 14:01 pivodi dijo:

    En momentos como este es cuando más echo de menos la televisión. No suelo ver esos canales en abierto, cosas del satélite, pero creo que en la lista de canales encontrados quizás estén, en la lista de favoritos no los tengo introducidos, normalmente suelo ver HispanTV, RT, CCTV, TeleSur, Fran24, BBC, lo normal, y sobre todo vídeos de internet o similares, en fin. Una pena no saber de este asunto, de ser así, hubiera intentado hacer por verlo, que demonios, este tipo de situaciones bien merecen el sacrifico.

    Si le sirve de algo, mi consejo hubiera sino: No vaya a esa televisión, no vaya, es una encerrona… pero claro, allá va el cabezón como siempre, directo, si es que… muchos cohones y poca cabeza, en fin. La próxima vez tenga más cuidado.

    El dinero es importante, sobre todo cuando es necesario, ha partir de ahí solo es un aliciente, en linea con su naviera alusión al honor mucho podría decirle. No hace muchos días en otro medio leí un refrán, o aforismo popular, que me gusto, y, que en momentos como este puede servirle de orientación, es el siguiente: “Pa ser puta y no ganar na, más vale mujer honrá”.

    Con respecto a los personajes en cuestión, el artista que hace de presentador y la chica mona que hace de jarrón, pues quizás yo soy mas moderado, ahí solo aplicaría la máxima de Cristo, algo así: “Padre mío, perdónalos, perdona a mis verdugos, perdona a mis perseguidores porque no saben lo que hacen”.

    Ahora bien, la vida sigue, el tiempo se agota, la antigua máxima “más enemigos, más Honor” es la ley. Señor Dragó, adelante, yo creo que hizo bien en su actuar, tal cual usted lo cuenta, poco mas puedo añadir sobre este asunto, me uno a su brindis, yo le lo ofrezco mi copa: ¡Ole! Y ¡Ole!

    Un saludo.

  2. A 19 Marzo 2013 @ 18:02 lolo dijo:

    Bueno, no me voy a reir del mal ajeno pero piensa que fuíste a un programa ridículo, creaste un personaje ridículo, todas las noches de debate hicíste el ridículo y te marchaste haciendo el ridículo…¿y ahora quieres sensibilidad?, ¿alguna vez fuíste sensíble ahí?..venga ya hombre, ahora no lloriquees…

    Mira que cada vez que leí una entrevista a Dragó escuchaba cosas bastante sensatas y hasta me caías bien ,incluso llegué a pensar: -”Este hombre és como yo (políticamente), un independiente”…

    Pero cuando te ví por primera vez como tertuliano en el programa (solo te ví 2 veces y porque salías tú)…pues eso, me quedé estupefacto…de piedra. De verdad pensé: -”¿Ese hijolagranputa és el Dragó?,¿ese hombre al que yo admiraba? . Me quedé totalmente defraudado y ya no sé ni quién eres…

    No te lo gastes todo en Champán que ya te veo en la Puerta del Sol sin trabajo, sin vender libros y con una pancarta de 15 M…

  3. A 19 Marzo 2013 @ 18:24 javier dijo:

    mira que le admiro, pero yo me preguntaba amen de la promocíón, ¿que pinta Dragó en telecirco? no será el maldito dinero que tanto le gusta.Señor Dragó, que es usted muy sabio y muy grande, que tiene la luz pagada, por favor no haga eso…

  4. A 19 Marzo 2013 @ 20:41 marta dijo:

    Felicitar al señor Drago y a su hija por responder con dignidad y libertad ante el espectaculo bochornoso que buscaba solo sacar la carnaza y la pochedumbre para alimentar a espectadores hambrientos, de los ajustes de cuentas y si son de temas familiares mejor.
    El presentador y la mona ayundente se Creen que pueden manipular a la gente intentando mostrarse como sorprendidos o victimas de un escritor y su hija .
    Pero el presentador y la mona presentadora son los depredadores y los que creen que todos son de su misma calaña ,haciendo el comentario de que con su ausencia querian vender mas libros. No entienden nada ,Drago y su hija hicieron uso de su libertad y de no seguirles el juego reduciendo un libro a las recrimaciones que una hija hace a su padre es decir cotilleos.Pero los puercos se alimentan de mierda y no aprecian la belleza.Drago tiene motivos para brindar con champan por la decision que tomo de abandonar el programa ;por su maravillosa hija Ayanta y por demostrale a su nuevo hijo que tiene un padre que no se vende a la chusma .Un abrazo muy fuerte a esta maravillosa familia que perpertua la dignidad y la confianza en la especie humana.

  5. A 19 Marzo 2013 @ 20:49 carlos martin dijo:

    Apreciado Dragó,
    No es el sitio para comentar esto, pero en la sección del elixir y salud, no he visto forma de hacerlo. Pido disculpas. En cualquier caso, será una torpeza breve, dos veces buena.
    Me estaba preguntando el por qué de la ingesta de semejante cantidad y variedad de substancias, para alargar la vida. Toda vez que estar aquí me parece una estupidez, creo suficiente la longevidad usual, como máximo de sufrimiento a padecer. Le comprendo, no obstante, aunque no comparto su afición por rondar más de lo supuesto por estas tierras… En fin, seguramente acabaremos en el mismo sitio y confío que entonces podremos discutir de lo acertado o no de estas líneas. Hasta entonces, sepa que tiene en mí un admirador de sus palabras, pues jamás leí libro suyo alguno. Un sincero saludo cordial,

    Carlos Martín

  6. A 19 Marzo 2013 @ 21:12 Mario dijo:

    Creo que Sánchez Dragó y su hija han hecho bien en abandonar ese circo que es Telecinco. Hay cosas que no tienen por qué aguantar, lo digo sinceramente. Telecinco trafica con personas y saca de ellas lo peor para generar audiencia y ganar dinero con los anunciantes. No hay más. La actitud de Dragó y su hija ha sido lo más digno que pueda recordar en los últimos años sobre ese programa de los sábados.

  7. A 19 Marzo 2013 @ 22:35 Dragón humeante dijo:

    En el momento me pareció algo exagerado. Como un golpe de efecto calculado, una broma, aunque tenía dudads.

    Luego lo vi todo claro. De todo lo ue dice el libro, fueron a coger solo lo más negativo. Eso da rabia. Hicieron bien en largarse.

    Saludos.

  8. A 19 Marzo 2013 @ 23:30 proeresio dijo:

    Quien va a Telecinco sabe bien dónde se mete. Que se lo digan a Olvido Hormigos. Pero es cierto que “El Gran Debate” (dime de lo que presumes…) es uno de los pocos programas donde se dan combates dialécticos e intercambio de ideas. (Sí, de aquella manera)

    En fin, nunca es tarde para abandonar el cenagal, y hacerlo con dignidad. Enhorabuena señor Dragó. Yo no puedo juzgarle por su costumbre de acudir a programas de mala muerte. ¿Qué haría yo si me ofrecieran una buena talegada de billetes por tirarme las cucharas en directo con otros contertulios? No lo sé. No tengo ni la posibilidad de verme en ese dilema ni el talento para desempeñarme en semejante menester (un gran alivio).

    Un cordial saludo.

  9. A 20 Marzo 2013 @ 00:06 ALESSANDRO dijo:

    Sr Drago , ? para cuando un libro de misticismo e historia ? ………

  10. A 20 Marzo 2013 @ 08:04 Er Manue dijo:

    Jordi es catalan, pero creo que La Noria se hace en Madrid.
    Es la podredumbre matritense de siempre: Corrala de arpias, chismosas, vecindonas, porteras, verduleras e intelectualeras. Ellos y ellas. Parece mentira que no la conozcas a estas alturas…

  11. A 20 Marzo 2013 @ 11:06 gallego dijo:

    Sandra(que se ponía gomina en el pelo cuando presentaba los telediarios de Antena 3) es de Barcelona…….

  12. A 20 Marzo 2013 @ 15:04 Chudito dijo:

    (… ole, ole y ole!!! Mejor que olé, olé y olé!!!)

    Y hablando de los medios político-financieros, diría que por el vil dinero se ha llegado a tal grado de degradación en prensa, radio y televisión que ya ni la buenas artes periodísticas son creíbles por más que no las quieran hacer creer aquellos periodicastros que viven de cuentos, historias e historietas literatureras o literarias.

  13. A 20 Marzo 2013 @ 15:46 Acxhopijo dijo:

    REINVINDICA TU DERECHO A IRTE

  14. A 20 Marzo 2013 @ 18:24 Isabel dijo:

    Vaya…vaya,
    He entrado en este blog creyendo descubrir un círculo de “intelectuales”…
    ¡Sorpresa! En el primer comentario, entre otras, esta perla: ” ha partir de ahí “

  15. A 21 Marzo 2013 @ 11:40 Tigre dijo:

    Me parecio genial lo que hicisteis ,eso te da la categoria que te mereces y no lo que querian hacer sacar carnaza entre Padre e Hija cosa que se demostro la poca verguenza que tienen en esa clase de programas

  16. A 21 Marzo 2013 @ 14:05 gatico dijo:

    el show de Dragó, … en continua autopromoción!!!

  17. A 22 Marzo 2013 @ 12:18 Javier de Soria dijo:

    Dragó, te admiro.

    Me gusta tu literatura, y se de lo contradictorio a veces de tus acciones. Pero, al final, aciertas.

    Gracias por las enseñanzas.

    Y cuidense los vengadores porque Dragó tiene AMIGOS.

  18. A 23 Marzo 2013 @ 01:18 lagai dijo:

    ¿Dignidad? este tipejo no conoce el significado de ese vocablo, ¡nunca la ha tenido y nunca la tendrá!, lo único que tiene es la piel muy fina. Nunca le importo si el programa era malo o bueno, cuando azotaban a los demás, simplemente se dedicaba a decir la soplapollez de” el corazón atiende a razones…… turruu! amén de defender siempre a los mismos con una caradura de difícil justificación,. Recuerdo programas en los que defendía a la banca frente a personas que se encontraban en plato llorando sus desgracias, ¡pese a ello! hay gente que habla de un gesto de dignidad al abandonar el plato por sentirse dolido con un tema personal ¿dignidad? dignidad hubiese sido defender a toda esa gente a la que habían desauciado y que el se pasaba por…..

  19. A 23 Marzo 2013 @ 16:37 Jorge dijo:

    Desde que vivo fuera de España ya no estoy al tanto de los horrores que se perpetran en las televisiones españolas, pero recuerdo lo que era “La noria”, y a su mentecato presentador, y digo mentecato con intención fiel a su etimología, “sin ánimo de acritud”. Hizo Ud. bien en salir pies en polvorosa, Sr. Dragó, aunque, como bien dice alguien en su comentario, le está bien empleado por meterse en ese antro, por mucho que necesite el vil metal. Parece que nunca es tarde para aprender una lección, como algunas que he aprendido yo leyéndole y también viéndole a Ud. y a sus invitados cuando hacía verdadera TV, como en el magnífico y no apto para logsetomizados “Negro sobre blanco”. A ver si me agencio el libro este verano cuando vuelva a Vandalia, porque me encantó el aperitivo de Ayanta que leí el otro día en una de las publicaciones que, afortunadamente, leo gracias al invento éste del quiosco digital.

    Quizá podamos echar una parrafada algún día viendo la puesta de sol sobre Wat Arun en alguno de los garitos que hay a las afueras del recinto del Buda Esmeralda, o ir a cenar a un coreano muy divertido que hay a escasos cinco minutos de la estación de Ueno. Tendré mucho gusto en invitarle.

  20. A 24 Marzo 2013 @ 18:35 Violeta dijo:

    Podrían haber participado y decir, en directo, lo que han dicho después.
    Usted se hubiera embolsado el dinero que dice necesitar y al presentador no le habría quedado más remedio que dar la cara y “defender” el engaño.

  21. A 24 Marzo 2013 @ 20:25 Divina dijo:

    http://www.elmundo.es/elmundo/2013/03/21/cultura/1363887004.html

  22. A 26 Marzo 2013 @ 16:25 Olga dijo:

    Reconozco que cuando os vi en semejante antro pensé: ¡Como es posible que Dragó y su hija hayan caído tan bajo!
    Me alegro que reaccionarais a tiempo. Creo que vuestro único “pecado” es una cierta inocencia que a mí personalmente me gusta, pero que tal vez en ciertos momentos puede perjudicaros…

    Besos para los dos!