La rana de Basho
Matsúo Basho, poeta peregrino del siglo XVI, escribió el celebérrimo haiku de la rana, que, traducido al castellano, suena así: “Salta una rana / en el viejo estanque. / Ruido de agua”. Un buen día, la rana de Basho saltó -¡plof!- al interior de un amigo mío y se puso a dar brincos dentro de él. Así nació El libro de la rana en el que su autor, José Pazó, propone cien recreaciones de ese haiku. Una de ellas dice: “El agua tiene ondas que nadie ve. / Todos cierran los ojos al aguzar el oído”. Háganlo ustedes y sentirán el invisible ir y venir del oleaje del alma del mundo bajo su piel”.
Publicado en Dragolandia, elmundo.es, 3 septiembre 2013